Comida de mamá!
Cuántas veces una imagen nos hace recordar sabores de la infancia; casi sin darnos cuenta nos identificamos con determinados gustos, especias, aromas, que van integrándose casi a nuestra identidad. Por esto también vale el dicho: somos lo que comemos.
Y durante nuestro crecimiento fuimos alimentados (o no) con la leche materna y con muchos otros sabores, únicos, con matices solo reconocibles por vos porque quedaron guardados en tu memoria. Quedando alojado en vos junto a ellos una imagen de mamá, papá o la abuela.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi11jwmApL_z5YE7bsgMQxVMre5qOr1hGbr1g1pfwrbvFisqhuFDUpTqI-tDit9yu_ZBruDWs8NQ6Iq0pEK7YzDW_Aq8-X_4hrMxKYcVX2d6UG_VK_rxilZkTbTNADZF3GAxAJMQSotH-DM/s200/Sanaci%25C3%25B3n+de+los+Ancestros.jpg)
También nos alimentamos de caricias, voces, o golpes y gritos; todos ellos integrando tu persona.
Qué te acerca o te aleja de la comida?
Así transitamos por nuestra vida, con nuestros ancestros respaldándonos en cada paso, a cada momento. Darles un lugar en nuestra vida, tomarlos como parte nuestra, honrar su presencia y compañía.
Como las mamushkas llevamos en cada uno de nosotros las historias que acompañaron a nuestros ancestros. Estas historias se hacen presentes en tu vida actual de distintas maneras. Con la Biodecodificacion podremos abrir la trama y así desprogramar desde lo más profundo el conflicto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario